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Hoy es un gran día. ¿Por qué no? Debería ser así, con todo lo que ello supone… aunque seguro que algunas mujeres no están de acuerdo por cualquier motivo… aunque seguro que muchas otras creen que incluso es insuficiente para el reconocimiento que deberían tener… del mismo modo, habrá hombres defensores y detractores de este simbólico día. Todo depende de la experiencia personal de cada uno/a y de la interpretación que hagamos del hecho de que exista este día.

A lo largo de mis casi treinta y seis años de vida, he tenido el privilegio de conocer a mujeres y hombres que me han enseñado muchísimo, estoy convencida de que muchos/as, sin ser conscientes de ello. Permitidme que hoy centre mi atención en ellas. Y permitidme también exponer mi punto de vista, como persona, como mujer y como psicóloga:

– Mujeres humildes, que prefieren pasar desapercibidas sin hacer gala de sus estupendas cualidades… seguid siendo vosotras mismas, pero permitíos el «pequeño gran lujo» de mostrar al mundo vuestra grandeza, tenéis mucho que ganar, a muchos niveles… y muchas personas merecen conocer vuestra genialidad.

– Mujeres exigentes, que no aceptan una derrota, que luchan hasta la extenuación persiguiendo sus metas… sois un auténtico ejemplo a seguir en muchos aspectos, pero por favor, tened siempre presente que vuestra mayor motivación debe ser el motor de vuestra ilusión… aceptaos por ser vosotras, enfocaos en vuestras metas siempre y cuando éstas alimenten sanamente vuestro yo más profundo y, debéis saber esto: sois geniales también sin conseguir metas, también sin plantearos grandes retos…

– Mujeres madres, una «raza aparte», una apuesta valiente, procedente de uno de los mayores motores de la ilusión humana, algo mucho más allá de un instinto maternal, un auténtico fenómeno emocional y universal… mi más sincera enhorabuena. Esta gran responsabilidad, en ocasiones tremendamente dura, os brinda la oportunidad de hacer del mundo un lugar mejor a través de la educación que transmitáis a vuestros/as hijos/as. Por favor, tratad de aprovecharla positivamente en la medida de lo posible…

– Mujeres todoterreno (o como ya llaman algunos, multitasking), que por elección o por necesidad, han iniciado el muy exigente y difícil camino de compatibilizarlo todo… si esto os llena emocionalmente, no cejéis en vuestro empeño, pero tened en cuenta que el camino más exigente no siempre es el mejor… es muy fácil que en algún momento aparezcan adversidades en alguna de vuestras numerosas facetas. Cuando sea así, priorizar, renunciar a algo y tomar decisiones basadas en vuestra intuición son estrategias fundamentales y pueden convertirse en una auténtica liberación…

– Mujeres que la «mente colectiva» (haciendo uso de un ilógico simplismo) ha decidido etiquetar como diferentes, raras e incluso enfermas mentales sin molestarse en comprobar que, en muchos casos, estas «rarezas» no son sino genialidades, rasgos creativos, puntos de vista diferentes sobre el mundo sin los cuales a veces la sociedad ni siquiera progresaría. Qué diferente sería todo si apoyásemos más a estas mujeres, ayudándoles a ser más fuertes cuando más lo necesitan… y cuando más lo necesita la humanidad…

– Mujeres que viven con miedo… que viven en el miedo… por tantos motivos… ¡¡ayudémoslas!!

– Mujeres que viven en la pobreza… si está en nuestras manos… ¡¡ayudémoslas!!

– Mujeres homosexuales, mujeres bisexuales, mujeres femeninas, mujeres masculinas, mujeres intelectuales, de letras, científicas, sabias, sanas, enfermas, modestas, de negocios, humildes, sensatas, alocadas, inseguras … seguro que me dejo en el tintero a muchísimas otras mujeres que hoy merecen un digno reconocimiento.

Sin duda, hoy debería ser un gran día para la humanidad. Gracias, mujeres únicas y hombres únicos, por enseñarme tanto…

¡Feliz Día Internacional de la Mujer!